I Torneo Madrid Tributa a Santana
El Club de Prensa K y K ha llegado a un acuerdo de colaboración con la acreditada Escuela de Arte Francisco Alcántara para que los trofeos de los campeones, alevín y veterano, del torneo popular y benéfico de tenis Madrid Tributa a Santana salgan de sus hornos de cerámica.
Después de la aprobación de la jefa de estudios y en coordinación con el profesor de Decoración Cerámica, Alberto Fernández, los alumnos de primer curso de Decoración Cerámica serán los encargados de crear los dos trofeos para los campeones; así como una réplica que recibirá el propio Manolo Santana.
La idea de K y K ha sido adoptada como un ejercicio válido para la asignatura de Decoración Cerámica, que será aprobado y supervisado por el propio Alberto Fernández junto a su alumnado.
La Escuela de Arte Francisco Alcántara fue fundada en 1911 por Francisco Alcántara Jurado, ilustre renovador de la pedagogía, ligado a las corrientes más progresistas de su época, y que fue prestigioso crítico de arte, catedrático y pintor. Destacó, igualmente, por su dedicación a reactivar la tradición alfarera y cerámica, que culminó con la fundación de este centro de enseñanza.
La escuela inició su actividad en el número 12 de la calle de Fernando el Católico, pasando, en 1934, a los terrenos llamados de ‘La Tinaja’, próximos a la ermita de San Antonio de la Florida, en los que estuvo la Escuela-Fábrica de los hermanos Zuloaga.
Francisco Alcántara consolidó definitivamente el proyecto al lograr en 1920 un acuerdo entre el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes y el Ayuntamiento de Madrid, por el que ambas instituciones compartirían a partir de ese momento la responsabilidad y el mecenazgo de esta enseñanza en la capital. La construcción de un edificio de nueva planta, obra del arquitecto Luis Bellido González, y la dotación de nueva maquinaria (molinos, prensas, tornos y hornos), serían el comienzo de una rica historia en este emplazamiento.
El centro fue adquiriendo un gran prestigio gracias a sus revolucionarios métodos de enseñanza con los que se identificaron, entre otros muchos intelectuales y artistas, Sorolla, Zuloaga, Muñoz Degrain, Menéndez Pidal y Ortega y Gasset; comenzando a exhibir sus trabajos en lugares como el Círculo de Bellas Artes, patio de Cristales del Ayuntamiento, patio del Ministerio de Estado o las Escuelas Aguirre.
Tras la Guerra Civil, se reanudaron las actividades docentes en el curso 1939-40, continuándose la labor iniciada con más ilusión y proyección exterior.
Hoy, la escuela se encuentra situada en un paraje excepcional, en medio del parque del Oeste, y conserva anexo el edificio y horno de la antigua Fábrica de La Moncloa. Las aulas y talleres ubicados en el pabellón Bellido cuentan con un espléndido jardín obra del pintor y paisajista sevillano Javier de Winthuysen.